El presidente de Colombia, Gustavo Petro, dijo este viernes que luego de que su país y Venezuela designaran a sus embajadores, lo que sigue es la apertura de la frontera no solo para los peatones sino también para el comercio y la producción.

Así lo expresó antes de iniciar visitas de cortesía al Consejo de Estado, la Corte Constitucional, el Consejo Superior de la Judicatura y la Corte Suprema de Justicia, los máximos tribunales de Colombia.

Refiriéndose a Venezuela, dijo que “ya hay un flujo peatonal, de personas, que ya no recurren a los senderos, que incluso se salvan de una serie de terribles violaciones a los derechos humanos en el cruce clandestino a uno u otro país”.

“Ya hay un flujo normal, ahora hay que ampliar eso al tema del comercio, al tema de la producción. Y vamos a seguir con una agenda”, dijo.

El jefe de Estado colombiano designó este jueves al exsenador Armando Benedetti como nuevo embajador de Colombia en Venezuela, mientras que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, confió este cargo diplomático al excanciller y actual director del Centro Internacional para la Inversión Productiva (CIIP), Félix Plasencia.

Colombia y Venezuela, que comparten una porosa frontera de 2.219 kilómetros, no mantienen relaciones diplomáticas desde que fueron rotas el 23 de febrero de 2019 por orden del presidente Maduro, en medio de una escalada de tensiones con su homólogo colombiano de entonces, Iván Duque, por su apoyo al líder opositor Juan Guaidó.

Sin embargo, Petro y su canciller, Álvaro Leyva Durán, ya han manifestado que también acordarán normalizar las relaciones con el gobierno de Maduro.

PRECIOS MÁS BAJOS PARA FERTILIZANTES

Petro, asimismo, afirmó que la apertura de la frontera tiene que extenderse a otros temas como el comercio y la producción para favorecer a la población de esta parte del país.

En cuanto a la primera línea, el embajador designado Benedetti dijo ayer que iba a sorprender al presidente colombiano “cuando lleguemos a los 10.000 millones de dólares en intercambio comercial, cuando beneficiemos a los más de 8 millones de colombianos que viven en la frontera”.

En ese sentido, Petro dijo que para continuar con la agenda con Venezuela, uno de sus propósitos es “lograr que el precio de los fertilizantes para producir en el campo en Colombia se pueda reducir sustancialmente para abaratar el precio de los alimentos, en referencia a Monómeros, cuya planta productiva opera en Barranquilla, capital del departamento colombiano del Atlántico.

Monómeros es una empresa petroquímica subsidiaria de Petróleos de Venezuela (PDVSA) con participación del Estado colombiano, de la cual Guaidó llegó a tener el control en 2019 y se encuentra en disputas legales.

La petroquímica fue, durante el mandato de Duque, uno de los motivos que generó mayor enfrentamiento entre ambos países, y que Petro coloca en su lista de prioridades, aunque no precisó qué solución propone ni cuál será el papel de Guaidó.