Van 410 periodistas asesinados o desaparecidos desde 1860; 222 de ellos desde diciembre de 2006
La Fundación General Ángel Albino Corzo Castillejos, con sede en Chiapa de Corzo, Chiapas, me honró ayer con su Premio Nacional de Periodismo Donato Corzo Ruiz, nombrado en honor al periodista chiapaneco asesinado hace 155 años, el 23 de septiembre de 1866.
Donato, hijo de Ángel Albino Corzo, el gran republicano liberal y Benemérito de Chiapas, Tabasco y Campeche, tenía 23 años el día en que recibió dos disparos en el pecho y un golpe de bayoneta en el estómago por parte de soldados que obedecían las órdenes del general. . José Pantaleón Domínguez, quien en 1865 traicionó la causa liberal y se convirtió en gobernador de Chiapas por la fuerza.
¿El pecado de Donato? Publicar en el semanario La Tijera, que él mismo fundó en 1861, un artículo de su autoría en el que criticaba el mal gobierno de Domínguez.
Antes que él, el 25 de diciembre de 1860, soldados liberales asesinaron en la Ciudad de México al conservador Vicente Segura Argüelles, quien en 1846 fundó el periódico satírico Don Simplicio, junto a Ignacio Ramírez y Guillermo Prieto. Tres años después, en 1863, Carlos R. Casarín, director del periódico quincenal La Orquesta, que criticaba tanto a liberales como a conservadores, murió en un duelo en la capital del país. El objetivo de uno de sus artículos lo desafió y lo mató a tiros.
Según la lista de periodistas asesinados en México, que se puede ver en es.wikipedia.org, desde el 25 de diciembre de 1860 hasta el actual mes de septiembre, 410 periodistas fueron asesinados, desaparecidos o murieron violentamente. Más de la mitad de ellos, 222, desde el 8 de diciembre de 2006, dos días después de que Felipe Calderón declarara la guerra al crimen organizado.
Diez periodistas fueron asesinados entre 1860 y 1900, y en cada década del siglo XX y así sucesivamente en el XXI fueron asesinados: tres entre 1901 y 1910; 21 entre 1911 y 1920; 11 entre 1921 y 1930; dos entre 1931 y 1940; seis entre 1941 y 1950; cuatro entre 1951 y 1960; dos entre 1961 y 1970; 12 entre 1971 y 1980; 46 entre 1981 y 1990; 36 entre 1991 y 2000; 106 entre 2001 y 2010; 146 entre 2011 y 2020.
Cinco han muerto en lo que va de 2021.
Las cifras nos dicen que el período más peligroso para los periodistas mexicanos comenzó en 2001. Desde ese año hasta la fecha, 257 han sido asesinados.
Si bien durante casi toda la historia independiente de nuestro país fue arriesgado ejercer la profesión, en ningún otro momento como el actual ha sido tan peligroso. Ni durante la intervención francesa ni el Porfiriato, ni en los años en que se libró la Revolución y las décadas posteriores.
Desde 2001, el número de periodistas asesinados en cada mandato presidencial ha sido el siguiente: 35 en el de Vicente Fox, 111 en el de Calderón, 85 en el de Peña Nieto y 26 en lo que va de Andrés Manuel López Obrador.
Con la llegada de Vicente Fox se acabó con la censura del gobierno federal y se relajó la ejercida por la mayoría de gobiernos estatales. También a partir de 2001, muchos periodistas se volvieron más críticos e independientes y su trabajo ofendió a políticos poderosos, empresarios o criminales. Algunos decidieron silenciar para siempre las voces de sus críticos y la mayoría de los asesinatos siguen sin estar claros en este país de impunidad.
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