Estados Unidos tiene previsto imponer el mayor incremento de la historia de su programa de ayuda alimentaria tras revisar sus estándares de nutrición, una iniciativa que permitirá a las familias más pobres del país contar con mayor poder adquisitivo en los supermercados, pero que también aumentará sustancialmente los gastos del país.

Según información adelantada por el New York Times, las nuevas normas, que se anunciarán oficialmente este lunes y que entrarán en vigor el próximo mes de octubre, significan que los beneficios medios aumentarán más de un 25 % en comparación con los niveles prepandémicos.